- La UICN creó una clasificación de las especies de manglares y su nivel de amenaza: "Las categorías y criterios de la Lista Roja de la UICN se aplicaron a 70 especies de manglares que representan 17 familias" (2)... De las 70 especies de verdaderas especies de manglares, 11 (16%) cumplían las condiciones para ser incluidas en una de las 3 categorías de amenaza: en peligro crítico de extinción, en peligro de extinción o vulnerable (ver la Tabla 1)"(3).
- Existen diferentes amenazas para los bosques de manglares, cada una de las cuales varía sobre la base de su severidad y sus consecuencias esperadas/observadas: “Las amenazas primarias para todas las especies de manglares son la destrucción del hábitat y la remoción de las áreas de manglares para la conversión a la acuicultura, la agricultura, el desarrollo urbano y costero, y la sobreexplotación. De estas, se espera que la tala irrestricta, la acuicultura y la sobreexplotación de las pesquerías en manglares representen las mayores amenazas para las especies de manglares durante los próximos 10 a 15 años (Alingi, 2002). El cambio climático también se considera una amenaza para todas las especies de manglares, en particular, en los bordes de una cadena de especies en las que la temperatura del mar y otros cambios ambientales podrían ser mayores. Con la suba del nivel del mar, los requisitos del hábitat de cada especia se verán distorsionados, las zonas de las especies sufrirán la mortalidad en sus zonas mareales actuales e intentarán restablecerse en elevaciones más altas en áreas que en el pasado eran zonas de progresión hacia la tierra (Ellison, 2005). Las especies de manglares con hábitat en el margen hacia la tierra son particularmente vulnerables a la subida del nivel del mar si se bloquea su movimiento tierra adentro debido al desarrollo costero”(6).
- Ciertas especies de manglares están más amenazadas que otras primordialmente debido a los requisitos ambientales abióticos de las especies: "Muchos bosques de manglares exhiben zonas de especies distintivas que se controlan mediante la elevación del sustrato relativo al nivel del mar medio y la variación relacionada con la frecuencia de la elevación, la salinidad y la acción de las olas (Duke, Ball MC y Ellison JC, 1998). Tal zonificación no suele ser siempre tan clara (Ellison, Mukherjee BB y Karim A, 2000) y puede verse interrumpida por la perturbación antropogénica"(6).
- Existe un sinnúmero de regiones en todo el mundo en las que los bosques de manglares se encuentran amenazados:
- “Aunque menos del 15% de las especies que se encuentran presentes en esta región constituyen categorías amenazadas (Figura 2), el archipiélago indo-malayo filipino presenta una de las mayores tasas de pérdida de áreas de manglares a nivel mundial con una reducción estimada del 30% del área de los manglares desde 1980 (FAO, 2007)”(6).
- “Las áreas geográficas que tienen números altos de especies de manglares con riesgo elevado de extinción probablemente exhiban una pérdida de la función del ecosistema, especialmente en las áreas de baja diversidad de los manglares. A nivel mundial, la proporción más alta de especies de manglares amenazados se encuentra en las costas del Atlántico y el Pacífico de América Central (Figura 2)”(7).
- “La región del Caribe cuenta con el área de manglares que presenta la segunda mayor pérdida en relación con otras regiones mundiales con una pérdida de aproximadamente el 24% del área de los manglares perdida durante el último cuarto de siglo (FAO, 2007)”(7).
- “Por ejemplo, en el Golfo de California, en el que hay solamente 4 especies presentes (Avicennia germinans, Rhizophora samoensis, Laguncularia racemosa, Conocarpus erectus), se estima que un kilómetro lineal de la especie R. samoensis, catalogada como 'casi amenazada', ofrece hasta 1 hectárea de hábitat marino esencial y un valor anual medio de USD37,000 en las pesquerías de cangrejo azul y peces (Aburto-Oropez et al., 2008)”(8).
- Recomendaciones: “Además de las acciones legislativas, se necesitan iniciativas por parte de los gobiernos, las ONG y los privados para adquirir y proteger las parcelas privadas de tierras costeras, en especial las que contienen poblaciones de especies de manglares amenazadas”(8).