El cambio climático está causando dos efectos importantes en las costas del mundo. El nivel del mar sube y la composición química de los océanos se está modificando (IPCC 2007 y NRC 2011). Es altamente probable que el ritmo al que ocurre esto supere la capacidad de adaptación de los bosques de manglares y las especies que viven en ellos (Gilman et al. 2008).
En las áreas con desarrollo costero de las tierras altas, los manglares no pueden retraerse en dirección a la tierra. Los manglares que se encuentran en los alrededores se adaptan a regímenes específicos de mareas. Si pasan cada vez más tiempo inundados, en algún momento, ya no podrán eliminar la sal de los océanos con la rapidez necesaria, y se marchitarán y morirán. Tampoco podrán recibir los nutrientes y sedimentos del agua dulce que fluye hacia el mar que precisan para poder sobrevivir. Además, a medida que aumente la acidez del océano, resultará más difícil para los animales de los manglares con conchas y otras estructuras sólidas (por ejemplo, ostras, caracoles, cangrejos y estrellas de mar) tomar el carbonato de calcio del agua de mar, lo que hará que presenten deformaciones del desarrollo y conchas más finas y menos protectoras en la adultez (Doney et al. 2012). Además, es probable que las barreras de coral —que ya presentan estrés por las temperaturas más altas y una mayor decoloración— se vean debilitadas a causa de la mayor acidez (Hoegh-Guldberg et al. 2007). Muchas especies –incluidas varias especies de pesquería comercial– se apoyan en los hábitats de las barreras en diferentes fases de su ciclo de vida. El cambio climático constituye una amenaza directa para estos hábitats, que son los responsables de proporcionarles alimentos a las personas en todo el mundo. Los manglares brindan los hábitats adultos y de cría críticos para entre un 30% y un 80% de las pesquerías comerciales del mundo (Rönnbäck 1999). Finalmente, los manglares se encuentran entre los sumideros de carbono más importantes del planeta (Donato et al. 2011). Su pérdida incrementará aún más las descargas de carbono (Donato et al. 2001), lo que creará un bucle de feedback positivo que exacerbará todavía más la subida del nivel del mar y el incremento de la acidez del mar.
Donato, D. C., J. B. Kauffman, D. Murdiyarso, S. Kurnianto, M. Stidham y M. Kanninen. 2011. "Mangroves among the most carbon-rich forests in the tropics" (Manglares: entre los bosques más ricos en carbono de los trópicos). Nature Geoscience 4: 293-297.
Doney, S. C., M. Ruckelshaus, J. E. Duffy, J. P. Barry, F. Chan, C. A. English, et al. 2012. "Climate change impacts on marine ecosystems" (Impacto del cambio climático en los ecosistemas marinos). Annual Review of Marine Science 4: 11-37.
Gilman, E. L., J. Ellison, N. C. Duke y C. Field. 2008. "Threats to mangroves from climate change and adaptation options" (Amenazas para los manglares a partir del cambio climático y las opciones de adaptación). Aquatic Botany 89: 237-250.
Hoegh-Guldberg, O., P. J. Mumby, A. J. Hooten, R. S. Steneck, P. Greenfield, E. Gomez, et al. 2007. "Coral reefs under rapid climate change and ocean acidification" (Barreras de coral bajo un importante cambio climático y la acidificación de los océanos). Science 318: 1737-1742.
Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). 2007: "Synthesis Report". (Informe de síntesis) Pachauri, R. K. & A. Reisinger, eds. 104.
National Research Council (NRC). 2011. "Climate stabilization targets: emissions, concentrations and impacts over decades to Millennia" (Metas de estabilización del clima: emisiones, concentraciones e impactos durante las décadas hasta los milenios). Washington DC: National Academies Press. 298.
Rönnbäck, P. 1999. "The ecological basis for economic value of seafood production supported by mangrove ecosystems" (La base ecológica del valor económico de la producción de mariscos sustentada por los ecosistemas de manglares). Ecological Economics 29: 235–252.